Mis abuelos maternos y mi madres eran húngaros. Y a diferencia de otras culturas , la cultura magyar tiene una fuerte unión con sus raíces y tradiciones, si bien yo nací en Buenos Aires Argentina, en casa se comía húngaro se escuchaba música húngara, mi madre bordaba y era muy común en reuniones familiares escuchar hablar húngaro y estar rodeada de su simbología, cuadros, mapas estampillas y libros de hungria. Hungría siempre estuvo en mi, herede todos los canones femeninos, la cocina, el bordado, la confección de ropa y también herede los canones masculinos (era la favorita de mi abuelo) el amor por la construcción y la ingeniería, los puentes y los caminos que conducen a otros paisajes.